fotoUn grupo de 9 profesionales de la comunicación y expertas en género han trabajado y aprobado el documento “Pon los Medios para lograr la Igualdad”. El pasado mes de abril, se reunieron en la Asociación de la Prensa de Madrid para poner en común sus reflexiones y conocimientos acerca de la comunicación y sus implicaciones en el camino hacia la igualdad.

Del trabajo previo y de esta reunión surgió este texto, enviado a las redacciones de los medios de comunicación y a sus profesionales, cuyo objetivo es servir de apoyo y referencia en su trabajo diario. El texto se apoya en el derecho de la ciudadanía a una información libre, veraz y de calidad, lo que exige un tratamiento informativo igualitario que ofrezca una imagen adecuada, no estereotipada y plural de las mujeres, tanto del Norte como del Sur. Entre las recomendaciones se habla de la necesidad de usar estadísticas desagregadas por sexo o recurrir a expertas, a profesionales, a organizaciones feministas y, por supuesto, a las mujeres de a pie cuando se busquen fuentes de información.

Las 10 Recomendaciones de la campaña ¡PON LOS MEDIOS PARA LOGRAR LA IGUALDAD!

Este documento nos propone una serie de preguntas a la hora de elaborar las informaciones: ¿Es o no sexista el lenguaje empleado?; ¿aparecen las mujeres en roles subalternos y supeditadas a su vinculación con algún hombre o son las protagonistas de la noticia?; ¿se recogen o no testimonios de mujeres?; ¿están asociados los roles representados a papeles tradicionalmente femeninos o a sus profesiones o participación política y social?

  1. El derecho de la ciudadanía a una información libre, veraz y de calidad exige un tratamiento informativo igualitario que ofrezca una imagen adecuada y plural de las mujeres, tanto del Norte como del Sur. Ejemplo: 6W. Además de las 5 preguntas periodísticas pregúntate si las mujeres están visibles en la información que redactas. Son la mitad de la población y todas las medidas también les afectan.
  2. El rigor periodístico aumentará si diversificamos y equilibramos las fuentes de información y tenemos en cuenta a las expertas, a las profesionales, a las organizaciones feministas y, por supuesto, a las mujeres de a pie. Para facilitar ese retrato más completo y preciso de la realidad también es muy útil el empleo de estadísticas desagregadas por sexo.
  3. Es importante evitar estereotipos sexistas. Pregúntate si harías los mismos comentarios/ descripciones en el caso de que fuera un hombre ¿Es o no sexista el lenguaje empleado?; ¿están asociadas las mujeres a los roles tradicionalmente femeninos (madre, ama de casa, cuidadora, etcétera), o a sus profesiones, participación política y social?;¿aparecen en roles subalternos, supeditadas a su vinculación con algún hombre, o por el contrario por sus propias acciones?; ¿se recogen o no testimonios de mujeres? ¿cómo aparecen esos testimonio?;¿están en posición de víctimas o se destaca su papel activo y/o de agentes de cambio?. Lo mismo se aplica a las fotografías y/o imágenes sexistas.
  4. La perspectiva de género no solo significa la transversalidad (atraviesa todos secciones informativas: política, economía, sociedad, educación, cultura, deportes, etc) sino que hay que  incorporar otras perspectivas para ver la información. Por ejemplo, la economía de los cuidados, base del sistema socioeconómico, que en muchos casos perpetúa el rol cuidador de las mujeres y genera situaciones de cuasi esclavitud para migrantes que se dedican a ese sector.
  5. La conciliación laboral, familiar y personal es un derecho de todos y todas las periodistas. No se puede considerar como un asunto de mujeres. Los y las periodistas deben exigir la inclusión de políticas de igualdad, y apostar por una promoción paritaria de hombres y mujeres en órganos de decisión.
  6. Los medios pueden jugar un decisivo papel social como observadores críticos del cumplimiento de los acuerdos nacionales e internacionales para promover la igualdad. Por ejemplo, la CEDAW, Acuerdos internacional contra la trata y explotación sexual, Objetivos del Milenio, etc. 
  7. Evitar caer en el paternalismo y etnocentrismo. No se puede justificar ningún tipo de violencia contra las mujeres por razones políticas, ideológicas y/o religiosas. Los derechos fundamentales están por encima de cualquier cultura patriarcal.
  8. La violencia de género es un problema de hombres que vulnera gravemente los derechos de las mujeres en todos los países. Por ello, se exige un tratamiento específico que proteja a la víctima y/o sobreviviente y condene al delincuente (en muchos países es un delito) y/o criminal. 
  9. Tenemos que ser consecuentes. No se puede denunciar la trata de mujeres sin denunciar la publicidad de prostitución o masajes que enmascara este delito (el proxenitismo) en los medios de comunicación.
  10. La educación es la base para alcanzar un tratamiento informativo igualitario. Se debe pedir una formación sobre género y desarrollo para las y los profesionales, así como pedir la inclusión de estos temas en la formación académica de las y los futuros periodistas.

En la elaboración de este documento han participado María Pilar Rodríguez, Catedrática de la Universidad de Deusto; Loles Díaz Aledo, que desarrolló su carrera en RNE, Charo Mármol, de la revista Alandar, Esther de la Rosa, de la Plataforma 2015 y más; Jeannete Mauricio, de la Red Internacional de Periodistas con Perspectiva de Género de Madrid; Susana Albarrán, del programa Nosotras en el Mundo de Radio Vallekas; Silvia Gamo, periodista de Tiempo; Manu Mediavilla, periodista de Colpisa y Ana Requena, periodista de Público.

Además, participaron las áreas de comunicación de las ONG Ayuda en Acción, InteRed y Entreculturas, que promueven esta Campaña; la coordinadora de la misma, María Pascual y la responsable de incidencia de la campaña, Mayra Moro Coco.

Todas y todos han puesto ya los medios para lograr la igualdad. ¡Ahora te toca a ti!

Si quieres conocer más acerca de Muévete por la igualdad. Es de justicia o descargar la agenda de incidencia pincha aquí  http://www.mueveteporlaigualdad.org/  

 

 

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