Esta búsqueda de posibles modelos arroja distintas alternativas: algunas nuevas y sin desarrollar, y otras que ya se encuentran desarrolladas y listas para ser utilizadas, como es el caso del gas natural vehicular (GNV).

El uso del gas natural en automoción no es una novedad. Países como Alemania, Italia, Argentina, Brasil, Pakistán, India o China disponen de importantes flotas que funcionan con este combustible. La compañía GAS NATURAL trabaja desde hace muchos años en la promoción e introducción del gas natural para uso en la automoción, realizando una apuesta decidida por esta tecnología que constituye, actualmente, la opción más viable entre los combustibles alternativos, tanto en términos técnicos como económicos.

Mejora de la calidad del aire y ventajas económicas

La incorporación del gas natural en las flotas de vehículos tiene como objetivo principal mejorar la calidad del aire de las ciudades y su entorno metropolitano. El tráfico rodado es una de las principales causas de exposición de la población urbana a los contaminantes atmosféricos, sobre todo por la emisión de partículas en suspensión y óxidos de nitrógeno, que provocan problemas cardio-respiratorios, especialmente en la población más vulnerable.

Con la incorporación del gas natural vehicular, se reducen las emisiones de partículas y óxidos de nitrógeno en más de un 85%, sin aumentar o incluso reduciendo ligeramente las emisiones de CO2 (principal gas de efecto invernadero), y se generan menores niveles de emisión sonora y vibraciones que los motores diesel.

Asimismo, un pilar del éxito de la extensión del GNV en flotas de ámbito metropolitano como los taxis es el ahorro económico en el gasto en combustible que puede suponer para el usuario, especialmente en un momento en el que el petróleo y sus derivados están marcando altos precios.

En este sentido, el ahorro medio alcanza el 22% en €/km sobre el gasoil, combustible utilizado principalmente por los vehículos profesionales. El precio del gas natural en la estación de servicio se referencia constantemente al del gasoil, para mantener ese diferencial, lo que para largos kilometrajes anuales puede suponer un ahorro económico muy importante.

El funcionamiento del motor de un vehículo a gas natural es exactamente el mismo que el de un motor de gasolina. Los vehículos ligeros de GNV, como turismo y furgonetas, tienen además generalmente un pequeño depósito de gasolina y pueden funcionar indistintamente con gas natural y con gasolina.

Origen de la aplicación del gas natural a la automoción

La tecnología del GNV se desarrolló en Italia, tras la Segunda Guerra Mundial, y permitió dar solución al trasporte en un contexto en el que la necesidad de reducir costes convergió con la disponibilidad de gas natural.

Más tarde, en la década de los 90, coincidiendo con la fuerte crisis económica y el encarecimiento de los combustibles líquidos, Argentina se situó a la cabeza de los países que desarrollaban el GNV, gracias a una elevada competitividad del gas natural de producción local, que permitió que el 21% de la flota (1,7 millones de vehículos) circulara con este combustible.

El gas natural vehicular en la Unión Europea

La política de combustibles alternativos a la gasolina y el diésel de la Unión Europea otorga al gas natural un porcentaje de penetración en 2020 que alcanza el 10%. Este porcentaje, que puede parecer de entrada poco ambicioso, representa en la práctica un volumen de 30 millones de vehículos funcionando a gas natural.

Algunos países como Italia o Alemania, se encuentran ya en un nivel avanzando de implantación del GNV. La red de suministro de GNV en Alemania, por ejemplo, supera las 900 estaciones de servicio disponibles. España se encuentra en el punto en que las Administraciones han establecido las bases e incentivos necesarios que habrán de permitir la expansión de este combustible.

El propósito principal de esta medida establecida por la UE es la reducción de la contaminación. Esta mejora se suma no obstante a la disminución de costes que permite el uso del gas natural como combustible en la automoción, y la combinación de ambas ventajas habrá de favorecer llevar a cabo el compromiso adquirido.

El Grupo Gas Natural cuenta con una notable experiencia en este sector, por su actividad en países donde el GNV es un combustible extendido, como Argentina, Brasil y Colombia. La compañía apuesta decididamente por liderar el desarrollo del GNV en España.

Estudio de caso: Mejora de la calidad del aire

Un reciente estudio (promovido por la Fundación Gas Natural, dirigido por el científico José Mª. Baldásano y realizado por un grupo de expertos en calidad del aire y del Centro Nacional de Supercomputación) evalúa cuantitativamente los cambios que se producirían en la calidad del aire de Barcelona y Madrid al implementar diferentes escenarios de sustitución por gas natural de los combustibles utilizados por flotas de vehículos. Las conclusiones determinan una disminución de las emisiones de NOx, COVs de hasta el 23%, de SO2 de hasta un 20,6% y de partículas PM10 de hasta un 43%. La medida más efectiva para reducir las emisiones en el caso de Barcelona es la transformación del 50% de vehículos reparto de mercancías, mientras que en Madrid es la transformación del 10% de turismos. No son medidas extraordinarias pero su impacto es realmente importante para la salud de los ciudadanos.

por Jaume Miró. Proyecto Desarrollo GNV. Gas Natural

www.gasnatural.com