Trabajadores propinan puñetazos, patadas y maltrato a los pavos.
Las impactantes imágenes que se encuentran bajo una investigación, fueron realizadas con una cámara oculta colocada por un grupo de derechos de los animales en una granja de pavos Ontario. El material está provocando duras preguntas sobre la falta de supervisión gubernamental en esta industria.
Un investigador de la organización “Misericordia para Animales Canadá” trabajó encubierto en una Granja en Kitchener, Ontario, haciéndose pasar por un empleado entre el 2 de diciembre y el 02 de febrero 2014, para reunir el material probatorio.
La Policía de Ontario confirmó que recibió una copia del vídeo 27 de febrero y se han puesto en marcha investigaciones sobre crueldad animal. La Sociedad de Ontario para la Prevención de la Crueldad contra los Animales (OSPCA) también está investigando.
Hybrid Turkeys, dijo en un comunicado de prensa que cuatro empleados fueron suspendidos con goce de sueldo y la empresa está participando plenamente en la investigación.
Las imágenes pueden herir su sensibilidad.
La semana pasada, la compañía anunció la vigilancia vídeo del sacrificio de aves de su criadero de Ontario.
Más de 21 millones de pavos son criados y sacrificados para comida cada año en Canadá, de los cuales alrededor del 60 por ciento provienen de Hybrid Turkeys.
La crueldad con los animales es un delito en el Código Penal, pero las investigaciones están por lo general dirigidas por sociedades provinciales para la prevención de la crueldad de los animales, que por lo general deben ser alertados por los denunciantes.
“Las únicas regulaciones que están vigentes se establecieron por el propio sector y el cumplimiento es completamente voluntario”, dijo François.
Misericordia para Animales Canadá ha pedido al Consejo de Cuidado de Animal de Granjas Nacionael, la organización de la industria agrícola canadiense que establece códigos de prácticas, modificar sus códigos con respecto al procesamiento de pavos.
Todas las aves enfermas o heridas deben recibir tratamiento inmediato por un veterinario cualificado y los pavos no deben ser criados para crecer tan rápido que se conviertan en lisiados por su propio peso, según el grupo de derechos de los animales.
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