Ahora, sí, “Nosotros, los pueblos”
Ha llegado el momento de, con gran apremio, implicarse en la gobernanza a escala local y mundial para hacer frente a los procesos irreversibles que …
Ha llegado el momento de, con gran apremio, implicarse en la gobernanza a escala local y mundial para hacer frente a los procesos irreversibles que …
En multitud de ocasiones, la gente nos pregunta qué puede hacer para apoyar nuestro trabajo a favor de la justicia y de un mundo sin hambre. Podemos responder muchas cosas, entre otras, ser más responsables a la hora de consumir.
Los hay que se refieren a estas situaciones como «fatalidad», «drama» o «desastre mundial». Pero la definición más ajustada del hambre la ha dado Jean Ziegler, analista político y exrelator especial de Naciones Unidas: «asesinato».
En 2015, El Niño provocó una de las peores sequías de las últimas décadas en Centroamérica y el Caribe. Ahora, la escasez de comida ha alcanzado un nivel crítico.
En la zona de El Corredor Seco, en Nicaragua se produjo una pérdida de las cosechas de entre el 30 y el 70%, y de entre el 70 y el 100% en Guatemala.
Las ONGs occidentales hemos cambiado. Luchar contra la pobreza no significa sólo atacar las consecuencias de la pobreza y repartir alimentos sino denunciar las causas que la provocan.
Los responsables de ACNUR y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) han advertido de que la falta de fondos, junto con los problemas logísticos y de seguridad en algunos países, han obligado a recortar las raciones de comida para casi 800.000 refugiados en África, lo que supone una amenaza para los ya de por sí inaceptables niveles de malnutrición aguda, de retraso en el crecimiento y anemia, sobre todo entre los niños.
El hambre es evitable. Sin embargo, el objetivo de Naciones Unidas de reducirla a la mitad en el año 2015 no se cumplirá. Los recortes en la ayuda internacional, los intereses comerciales sobre las tierras o el cambio climático mantienen a 842 millones de personas en condiciones de hambre crónica. No podemos abandonar la lucha contra el hambre.
El índice anual GHI 2013 puso a los tres en situación “grave o muy grave”. Paraguay es el que más retrocedió en los últimos años y África sigue en extrema necesidad.
El Gobierno de Kenia y la UNESCO han anunciado el descubrimiento de dos acuíferos subterráneos de agua dulce en una árida región norteña. La información se hizo pública en la conferencia sobre seguridad hídrica en Nairobi.