Gritar y pensar las diferencias
Ahora mismo el océano Pacífico “grita”. Como su misma denominación, “océano”, reventando l’ola en la “e” del diptongo impedido. “Ruge”, se usa decir mejor, a doscientos metros de mi ventana –y el rocío de l’espuma humedece la cortina. Todo esto figuraciones, producción de figuras: no hay ni “océano”, ni “grito”, ni “rugir”, ni “humedad”, en esta página. Pero si sus palabras.
Entonces, al final, ¿què hay?