Lo que las dos organizaciones buscan es una mejora de las condiciones laborales de los menores, que se incluya la escolarización y que desaparezcan los abusos y la explotación. Por supuesto, la solución ideal sería que desapareciera la figura del niño trabajador, pero mientras este hecho continúe siendo una utopía, sobre todo en los países más desfavorecidos, se debe luchar para que los niños trabajen en las condiciones más dignas posibles.

Como explica Berta Horno, de la ONG Save the Children: “Lo principal es hacer visibles a los niños trabajadores, no criminalizarlos por el mero hecho de tener que trabajar. Debemos intentar que puedan ir a la escuela y tengan buenas condiciones laborales e higiénicas”. Juan Hunt, director de la OIT en España, hizo declaraciones en esa misma línea: “La OIT no se opone a todo el trabajo infantil, sino a la explotación, a las labores que no les permitan ir a la escuela ni realizarse como personas, y a las condiciones que les dejen secuelas físicas y psíquicas”.

Algunos de los empleos donde se ven más casos de menores trabajando son el de la minería, sector donde existe un millón de niños trabajadores (una quinta parte lo hacen sólo en
África Occidental, en condiciones totalmente indignas); o también la agricultura, donde, según datos de la OIT, hay 130 millones de niños y niñas empleados, con salarios mínimos o incluso a veces nulos.

Si ya pasamos al terreno de los trabajos ilegales y la explotación, existen repulsivos negocios que mueven miles de millones de euros al año, como las adopciones ilegales, el tráfico de órganos o el turismo sexual, negocios que afectan más de 10 millones de niños y bebés en todo el mundo.

Dentro de todos estos estremecedores datos existen también agunas buenas noticias: por ejemplo, la OIT ha conseguido que en América Latina trabajen 28 millones de niños menos que hace cuatro años, cifra que supone el 11% del total de menores empleados en esa zona del planeta, especialmente en los países de México y Brasil.

Trofeos “Elan de Mode 2007” a la moda ética

Las empresas francesas IDEO y Misericordia, dedicadas al sector de las confecciones en Perú, recibieron el pasado 20 de junio los trofeos “Elan de Mode 2007” (que significa “Impulso a la Moda 2007”). Los premios, entregados en París por la Federación Francesa del Prêt à Porter Fermenino (FFPPF), valoran a aquellas empresas que más comprometidas han estado con el mundo de la moda y sus intercambios comerciales justos. La entrega de los galardones tuvo lugar en el marco de la Asamblea General de la FFPPF, y fue su presidente, Jean-Pierre Mocho, el encargado de dirigir el acto.

fotoAdemás de las dos compañías mencionadas, hubo diez premiadas más, todas ellas marcas francesas que respetan los principios del comercio justo mediante el uso de algodón biológico.

Ideo, empresa nacida en Francia hace cinco años, se dedica principalmente a las colecciones de ropa deportiva. Actualmente, la fabricación de la mayor parte de los tejidos tiene lugar en Perú. Ideo trabaja con pequeños productores, pagando por el algodón biológico un 25% más de su coste en el mercado, y colabora a mejorar las condiciones laborales de los empleados. Además, pagan al menos el 50% de los productos antes de entregarlos, para evitar de esta forma que los productores tengan deudas.

Por otra parte, Misericordia se creó en 2002 con una idea inicial de unir creación con compromiso social. Esta empresa, con sede en Perú y oficinas en París, es considerada una de las primeras marcas que trabajaron con los principios de moda ética y
Comercio Justo.

Esta empresa, que tiene 15 empleados, que trabajan 45 horas semanales recibiendo un salario superior al salario mínimo en un 35%, produce alrededor de 15000 prendas anualmente.

Tanto IDEO como Misericordia trabajan estrechamente con la Embajada del Perú en Francia y han participado en eventos como Perú Moda.

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Siguen los gestos de acercamiento del
Comercio Justo a los ciudadanos españoles

Cada vez son más los actos que promueven el
Comercio Justo en distintas partes de España, actos que son la mejor forma de acercar el concepto a todos los ciudadanos que no están aún familiarizados con él.

fotoPor ejemplo, en San Clemente (Cuenca) tuvo lugar recientemente la semana del
Comercio Justo, organizado por el Centro de Formación del Consumidor de San Clemente, junto con el Ayuntamiento y la concejalía de sanidad y consumo.

El objetivo de las jornadas era dar a conocer a los habitantes de la localidad la realidad respecto a la sobreexplotación de los trabajadores de los países más pobres. Para ello, se programaron una serie de actos, como los “los desayunos con sabor a justicia”. Estos desayunos, donde se consumieron productos originarios de la red de
Comercio Justo, incluían lecturas de libros y debates acerca de la situación de la mujer en los países menos desarrollados.

Por otra parte, en Extremadura, la Red Diocesana de
Comercio Justo (entidad creada hace años por Cáritas Diocesana) planea abrir cuatro puntos de venta permanentes de productos justos en distintas localidades de la comunidad: Alburquerque, Fuente de Cantos, Zafra y Villanueva de la Serena.

Cerca de 10.000 personas en la octava edición de la fiesta del
Comercio Justo

La Plaza de Cataluña, en Barcelona, fue la sede de la fiesta del
Comercio Justo. El éxito fue rotundo, con una afluencia de visitantes de aproximadamente 10.000 personas. Y es que Cataluña concentra el 35% de las ventas de productos justos de toda España, convirtiéndola en la comunidad más solidaria en este sentido. En esta lista le siguen otras comunidades como Madrid (20,3%), Galicia (15,5%) y Andalucía (9,3%).

En esta edición de la feria, la novedad que más llamó la atención fue la banca ética, un concepto alternativo que busca combinar beneficios sociales y financieros. Lo que proponen se define como “uso ético” del dinero, usando fórmulas como la concesión de microcréditos a personas que son rechazadas en los bancos convencionales por falta de garantías y avales, o la inversión en empresas responsables medioambiental y socialmente, que no tengan relación con los negocios con armas o los paraísos fiscales.

fotoActualmente existe una entidad de banca ética en Cataluña: Triodos Bank. Se espera que a finales de este año se una Fiare como segunda entidad bancaria justa. En todo el mundo existen unos treinta bancos de este tipo.

Los organizadores del evento fueron Alternativa 3, FETS-Financiación Ética y Solidaria, Intermón Oxfam y Setem. Además de Barcelona, unas sesenta localidades catalanas más celebraron durante las mismas fechas otras fiestas similares, con una asistencia de unas 70.000 personas, según los cálculos de la organización. El balance total de ventas de los dos últimos años aún está en fase de recuento, pero las cifras de 2005 fueron de 3.753.174 millones de euros en ventas. Se espera que en las ediciones posteriores haya aumentado esa cifra.

Los visitantes que acudieron a la feria pudieron familiarizarse con los problemas que sufren los sectores del café, el algodón, el cacao o el azúcar entre otros. El mercado de ese tipo de productos es controlado por unas pocas empresas que se enriquecen con su comercio, obligando a los pequeños productores a vender por debajo de los precios de producción y dejándoles unos beneficios muy escasos que muchas veces son insuficientes para afrontar los gastos mínimos de vivienda o alimentos. Asimismo, en la feria se denunció la desigualdad existente entre hombres y mujeres en el mundo laboral, la explotación infantil existente en muchos países del sur, y la falta de respeto al medio ambiente y los recursos naturales.

Algunas de las actividades realizadas durante el día fueron: talleres de cocina, pase de documentales, música, espectáculos de animación infantil, degustaciones, conferencias y un desfile de moda.