El eje temático será la nueva campaña del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Piensa.Aliméntate.Ahorra. Reduce tu huella alimentaria, cuyo objetivo es reducir el desperdicio de alimentos.

Se calcula que, todos los años, un tercio de los alimentos producidos en el mundo para consumo humano termina echándose a perder en las basuras y contenedores de consumidores, comerciantes, agricultores y transportistas.

Estos 1,3 millones de toneladas, cuyo valor ascendería a cerca de 1 billón de dólares, bastarían para alimentar varias veces a los 870 millones de personas que pasan hambre todos los días.

La cantidad de alimentos no consumidos, que podría reducirse significativamente con medidas muy sencillas, implica también un desperdicio energético en forma de electricidad y combustible utilizados para la producción de alimentos y su transporte a largas distancias.

Además, los alimentos en descomposición de los vertederos generan cantidades significativas de emisiones de metano, un poderoso gas de efecto invernadero, mientras que la pérdida de bosques para dedicar la tierra a la ganadería y a la producción de alimentos contribuye al calentamiento global.

 

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