Ya dije en un reciente artículo titulado: Ni santos ni inocentes, que los votantes del Partido Popular tienen, por activa o por pasiva, responsabilidad sobre que al final vuelva a gobernar Rajoy. Pero a pesar de lo que yo piense la democracia es soberana y me guste o no, la mayoría manda. Sin embargo, esta mayoría precisa de apoyos o abstenciones, además de los de Ciudadanos, para formar gobierno, y aquí está el meollo de la cuestión.

Aquí todo el mundo se mantiene en sus poderes, como Luis XIV. Ni unos ni otros reblan, los partidos de derecha porque es su oportunidad; Podemos, Izquierda Unida o Esquerra Republicana porque jamás les apoyarían y los partidos nacionalistas porque saben que esta vez no sacarán tajada. Por tanto todos miran al partido socialista y le exigen visión de estado, responsabilidad y sentido común, cosas de las que el PP carece. Lo demostró Rajoy rechazando hace unos meses la invitación del rey a formar gobierno y dejó que fuese la oposición quien se responsabilizase, por supuesto sin su abstención ¡faltaría más! Y llevando al País a unas nuevas elecciones. Le salió bien el mutis y consiguió más escaños, por tanto él es el ahora el único responsable y no debe traspasar la patata caliente.

Estoy absolutamente de acuerdo con la posición de Pedro Sánchez a pesar de que muchos dirigentes del PSOE digan lo contrario desde sus despachos o atrapados en una puerta giratoria de Gas Natural. La visión de Estado no es sólo una acomodada oportunidad, es un compromiso con el futuro del País y con el Pueblo y los corruptos comprometen ese futuro y se burlan del Pueblo.

Dicen que unas terceras elecciones serían una vergüenza para la clase política. Cierto.  Han cometido tantos errores unos y otros que el ciudadano se va cansando de sus actitudes. Se agotan tanto los votantes que existe la seria amenaza de que una votación navideña daría la mayoría absoluta al PP, vaya una paradoja. Si eso es así, si el Pueblo por cansancio, por saciedad o por aburrimiento les vota mayoritariamente, tal vez esta gente sea todo lo que merecemos los españoles.