Este artículo es una reflexión sobre los importantes cambios que se vienen produciendo desde fines de la década de los ochenta del siglo pasado en nuestra manera de ser y de pensar, así como hechos políticos relevantes (con la caída del muro de Berlín y de los gobiernos comunistas del Este de Europa) hasta los importantes cambios económicos e innovaciones tecnológicas que nos dan pie para considerar que estamos en el umbral de una nueva etapa histórica.

Para considerar finalizada una etapa histórica e iniciar una nueva tienen que haberse producido una serie de cambios sociales, económicos y culturales de gran importancia y trascendencia. Pienso que todos los cambios producidos desde finales del siglo XX hasta hoy en día son de tanta trascendencia que bien se podría ir pensando en una nueva era histórica que yo denominaría: La era Postcontemporánea.

Efectivamente, en estas últimas décadas se han producido cambios muy sustanciales en distintos comportamientos, hábitos y costumbres en la mayor parte de las actuales sociedades a nivel mundial. Veamos algunos de los más importantes:

1. El cambio de la mentalidad

  • Hoy en día los jóvenes llegan al matrimonio mucho más tarde que lo hicieron nuestros padres o abuelos. Hasta principios de los años setenta del siglo pasado era normal casarse por la Iglesia antes de cumplir los 23 años mientras que hoy en día (cincuenta años más tarde) se casan mucho más tarde (pasados los 32 años) y menos de la mitad se casan por la Iglesia (viven juntos sin papeles o casados por lo civil).
  • El laicismo, en el sentido más amplio de la palabra, lleva décadas imponiéndose en los países más desarrollados en detrimento de las normas y dogmas de las confesiones religiosas que tienden a decrecer en cuanto a número de fieles y seguimiento doctrinario.
  • La imposición del inglés como idioma universal necesario en todos los países del mundo para poder disponer de un buen puesto de trabajo en detrimento de las demás lenguas nacionales del resto de los países. Esto conlleva, además, el colonialismo lingüístico que da lugar a las imitaciones, gustos y costumbres inglesas y norteamericanas.
  • El feroz consumismo que cada año es mayor y nos obliga a comprar todo tipo de productos de bienes y de consumo aunque no se necesiten. Las sociedades actuales cada vez son más consumistas atraídas por la publicidad que nos bombardea constantemente y hace necesario la compra de determinados productos que no lo son.
  • El cambio profundo en la mentalidad de las mujeres de todos los países del mundo que cada vez luchan con más fuerza para equipararse con los hombres. Esto da lugar a un gran número de movimientos feministas que se manifiestan en las calles de las ciudades de todo el mundo para conseguir esa igualdad en derechos, salariales, sociales, culturales, etc.
  • La profunda crisis de la familia tradicional formada por un hombre y una mujer y dos ó tres hijos que está perdiendo peso año tras año por la inclusión de las parejas geys, lesbianas, transexuales, parejas de hecho o casadas por lo civil.
  • La falta de valores en nuestras sociedades actuales en la que todo vale y prima las cuestiones materiales (conseguir dinero fácilmente y lo antes posible) dando lugar a numerosas corrupciones en los ámbitos políticos y económicos. Los principios cristianos y éticos han quedado relegados a un segundo o tercer plano. Lo importante, hoy en día, es ascender en la escala social, conseguir una importante acumulación de dinero y bienes materiales a costa de lo que sea.
  • Esta corrupción que cada vez es más general y evidente no repara siquiera en el tráfico de seres humanos. Ya no solo se dedica al negocio de las drogas sino también a la trata de blancas y la mafia que negocia con los pobres migrantes una cantidad muy elevada de dinero para pasarlos como meras mercancías a Europa por cualquier medio sin importarles si mueren asfixiados o ahogados en el tránsito hacia Europa.

2. El cambio político

  • Con la caída del muro de Berlín y de los regímenes comunistas del Este de Europa y de otros países no europeos se establece una “democracia casi universal” pero más formal que real ya que cada país ha perdido gran parte de su soberanía particular para unirse en pactos con otros países de su entorno (caso evidente es el de la UE).
  • Implantación de una democracia que, en general, no vela por los intereses de los ciudadanos sino que está al dictado de lo que demanden las grandes compañías nacionales e internacionales (multinacionales) que presionan a los diversos gobiernos europeos y mundiales para conseguir todo tipo de beneficios y prebendas.
  • Surgimiento de nuevos partidos de ultraderecha inexistentes hace unas décadas y que se van asentando en muchos de los países de Europa y del resto del mundo. Estos grupos cuentan con importante apoyo logístico y económico y están dentro de los parlamentos democráticos pero para, desde dentro, acabar con ellos.
  • Cierto cansancio de las sociedades avanzadas hacia estas democracias formales que provoca que muchos ciudadanos no vayan a votar el día de las elecciones y se queden en casa. En muchos países de vieja raigambre democrática la abstención llega a superar el 50%.
  • Desinterés político de los ciudadanos en votar a los partidos tradicionales de derechas o izquierdas y búsqueda de nuevos partidos populistas (de extrema derecha o extrema izquierda) que hacen más difícil el entendimiento entre ellos y pueden llegar a paralizar las instituciones democráticas.
  • Corrupción casi generalizada entre numerosos políticos (tanto de derechas, centro e izquierdas) que ocupan cargos públicos para su beneficio personal. Muchos presidentes, ministros y secretarios, alcaldes y hasta concejales están siendo investigados por la justicia de gran cantidad de países a nivel mundial por apropiación indebida de caudales públicos y, muchos de ellos, están siendo encarcelados.

3. Cambios económicos

  • La globalización económica que en las últimas décadas se ha impuesto en todo el planeta. Gracias a los nuevos y modernos medios de transporte y a las mejoras en infraestructuras los productos fabricados en un determinado país llegan, en pocas horas o en escasos días, a los países más recónditos del mundo en perfecto estado. Es el sistema económico que predomina hoy en día y que dirige las relaciones internacionales entre todos los países, capaz de marcar las políticas económicas y sociales de cualquier Estado del mundo e incluso derribar o aislar gobiernos pues está en manos del G8, grupo de países más poderosos del mundo que dictan las directrices económicas a todos los demás países.
  • Si hasta mediados del s.XX la actividad económica más importante era la secundaria (industria) a partir de finales del siglo pasado se impone la actividad terciaria o de los servicios que, en muchos países desarrollados supera el 72% de su población activa. Es otro indicador inequívoco del paso producido en las últimas décadas de la población activa industrial hacia el de los servicios que incluso en los países subdesarrollados ya supera el 50%.
  • Los indudables cambios en los modelos productivos en los que ya no es necesario ocupar un puesto de trabajo en una industria sino que existen personas que trabajan en sus casas utilizando Internet para sus negocios, es otro claro ejemplo del cambio económico-social perceptible en los últimos tiempos y que explicaría, en parte, la escasa fuerza sindical que se puede apreciar en los últimos años, de ahí que los sindicatos opten por el diálogo y el consenso al ser conscientes del escaso apoyo social con el que cuentan. Se está pasando de las luchas obreras, con grandes huelgas y manifestaciones típicas de fines del S.XIX y principios del XX, a reducidas manifestaciones, escasas huelgas, contención salarial y pasotismo social.
  • El aumento constante de la automatización y la robótica que hacen los trabajos que antes realizaban miles de trabajadores y que, hoy en día, realizan en gran parte de las actividades económicas actuales en campos como la fabricación de automóviles, siderurgia, metalurgia…
  • Dentro del ámbito técnico-científico, en donde la informática e Internet ocupan un puesto relevante y que era desconocido para todos nosotros hace apenas veinte años, la nanotecnología, los innumerables avances médicos (lucha contra el sida, cáncer, genoma humano…) e incluso la más que probable conquista espacial dentro de los próximos decenios. Todas estos adelantos tecnológicos ha dado lugar a un nuevo sector económico denominado cuaternario.
  • El empleo de drones que desde el aire se pueden emplear para múltiples fines como usarlos para sacar fotografías, medir el grado de contaminación de la atmósfera, saber la extensión de una inundación y también para usos militares como el empleo de drones para disparar desde el aire o lanzar pequeñas bombas controladas. En el campo militar también se han diseñado, en las últimas décadas, aviones de combate no tripulados o soldados metálicos robotizados que disparan constantemente guiándose en los focos de calor que perciben.

4. Cambios culturales

  • Tal vez uno de los hechos más relevantes en este campo sea la casi desaparición del cine. Hasta los años sesenta del siglo pasado el cine era uno de los espectáculos que atraía a cientos de millones de personas en todo el mundo. Existían incluso varios cines en un mismo barrio. Hoy en día se mantiene gracias a ayudas estatales y a estrenos realizadas por las grandes compañías multinacionales pero es evidente que su ámbito se ha reducido en gran medida debido a la competencia de la televisión, CDs, Internet, etc.
  • El descenso en la producción y consumo del libro tradicional lo que ha conllevado al cierre de millones de librerías en todo el mundo debido a la competencia de los nuevos avances tecnológicos como el libro electrónico o Internet.
  • La libertad total y sin reglas de toda manifestación artística que es capaz de considerar una obra de arte a una simple lata titulada “Merda d´artista” producida por un italiano en 1961. En adelante todo será válido para el arte, desde desnudos masculinos o femeninos en grandes grupos para ser fotografiados o expuestos durante horas al aire libre hasta exposiciones reales de cadáveres humanos, huesos, cráneos, etc.

Todos estos elementos, que acabo de señalar, nos han de dar pie para reflexionar si no estará quedando obsoleta la denominada Historia contem-poránea. Pienso, mejor dicho muchos historiadores pensamos, que habría que buscar un nuevo término para denominar a todos estos cambios (de mentalidad, políticos, económico-sociales, culturales…) porque el traje se nos está quedando pequeño. ¿Nueva división? o ¿subdivisión dentro de la Historia contemporánea?. El análisis y los pertinentes estudios nos lo dirán en los próximos años.