También nos recuerda, cómo unos años después, en 1993, el Senador Luis Guillermo Vélez dijo a la Embajada de EEUU en Colombia que Álvaro Uribe Vélez tenía nexos familiares con el clan Ochoa del Cartel de Medellín y que ellos habrían financiado su carrera política.

Al principio de los 80, la demanda de cocaina en tierras norteamericanas iba en aumento pero el Cártel de Medellín necesitaba formas más eficientes para poner la cocaina en territorio estadounidense, se necesitaban más pistas y aeronaves para lograrlo.

En la dirección de la Aeronáutica Civil se encontraba un hombre honesto, Fernando Uribe Sénior, quien se dedicó a cerrar pistas y revocar licencias a el narcotrafico; por eso, lo amenazaron y finalmente, lo asesinaron en 1980. Quien lo sucede en el cargo fue Álvaro Uribe Vélez, quien nunca fue amenazado.