El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, está decidido a realizar una cruzada internacional contra la petrolera estadounidense. En consecuencia, el jefe de Estado lanzó una campaña para denunciar el daño ambiental en la Amazonia.
Los habitantes de la Amazonía de Ecuador han denunciado, en un reportaje elaborado por la agencia Andes, que reciben presiones por parte de la compañía petrolera estadounidense Chevron.
Durante el programa radial Enlace Ciudadano 333, el jefe de Estado ecuatoriano destacó que maneja información de que la empresa Chevron ha contratado cerca de 900 abogados para llevar adelante su “campaña”, apoyados por asesores opuestos al Gobierno en su país y la prensa nacional.
Halliburton destruyó pruebas para torpedear la investigación abierta tras el vertido de petróleo que provocó la tragedia humana y medioambiental del Golfo de México.
Según una nueva investigación, las consecuencias del derrame de petróleo de Deepwater Horizon ocurrido en el Golfo de México hace casi tres años se matienen y se agravan.
Recientemente, la televisión holandesa transmitió un largometraje documental sobre un terrible legado mortal de la contaminación de la refinería Isla en Curazao construido y operado por muchas décadas por Shell.
Oceana ofrece información sobre las especies más afectadas por estos vertidos “silenciosos”, incluyendo aves marinas, tortugas o cetáceos y propone una Directiva fuerte, con sanciones criminales para quienes contaminan el mar.
Alaska forma parte de los EE.UU como estado desde el año 1959, pasando a ser el más grande de la nación. Es un lugar dónde la vida es salvaje y agreste. Posee una riqueza incalculable tanto en su biodiversidad como en el potencial minero y petrolífero. Antiguamente pertenecía a Rusia, pero en el 1867 fue vendida por el ahora risible precio de 7,2 millones de dólares. Su nombre proviene de una palabra esquimal que significa “grandes tierras”.
Greenpeace acoge con satisfacción el acuerdo preliminar entre el Parlamento y el Consejo Europeo sobre una futura legislación europea sobre perforaciones petrolíferas en aguas profundas. Si se confirma, la ley podría limitar e incluso impedir la extracción de petróleo en condiciones marítimas extremas como las del Ártico, donde la limpieza de un derrame es técnicamente imposible.
En la población de Jusepín en el estado Monagas, al oriente de Venezuela la rotura de un oleoducto de transporte de petróleo de PDVSA, causó un derrame de crudo recientemente, provocando una crisis de suministro de agua y según muestran imágenes se hace probable un severo daño ecológico.
