Más desarrollo social con menos crecimiento económico
Cuando Víctor Hugo escribía en el año 1862 su novela “Los Miserables” ya tenía muy claro que una cosa es ver cómo de capaz es un país de producir riqueza y otra muy distinta si era tan virtuoso haciendo uso de la misma. De manera que solo si hacía las dos cosas (producir y usar la riqueza) satisfactoriamente se podría decir que vivimos en un país con una economía saludable.