Miguel Esteban- ¿Podría usted contarnos un poco de su vida y actividad literaria?

 José Luis Marín Aranda- Podría decir que he tenido dos tiempos importantes en mi vida; de una parte, mi trabajo profesional centrado en el área de Dirección y Desarrollo de Personas y Organización. En los cargos ocupados en los consejos de administración y en la gestión, como alto directivo, en empresas de banca, mutuas, formación y consultoría. También tuve amplias experiencias docentes en centros de formación, escuelas de negocios y universidades.

Y por último ocupé varios años como consultor estratégico y conferenciante en diferentes foros, empresas e instituciones. En estos trabajos se me fue el tiempo por las ventanas de los despachos y los recovecos de mis ocupaciones. Aunque siempre he estado escribiendo y pintando, mi desarrollo literario como poeta e ilustrador vino cuando pude ser dueño de mi tiempo.

P- ¿Cuáles fueron sus primeras lecturas poéticas y qué autores le influyeron?

R- Yo estudié el bachillerato en los Salesianos de mi ciudad natal, Algeciras, allí entre en contacto con los clásicos universales, leyendo y estudiando a los grandes pensadores de la cultura greco-romana, al tiempo que leía y estudiaba también a los clásicos españoles, desde los romanceros hasta los escritores del 98.

Me interesaron mucho los escritores del Siglo de Oro español, así como el renacimiento italiano. Me influyeron mucho los estilos de Fray Luis de León, San Juan de la Cruz, Espronceda y fundamentalmente Antonio Machado. Posteriormente me interesé bastante por los escritores franceses, sobre todo Baudelaire, Víctor Hugo y Rimbaud.

P- ¿Cómo definiría a su poesía?

R- He comentado en muchas ocasiones que mi poesía tiene unas raíces clásicas que marcan la musicalidad de mis versos. Mi lenguaje es directo y claro, con palabras sencillas llenas de sensibilidad. Me gusta escribir sobra la mujer, la naturaleza, el amor, y el tiempo. Acudo a la realidad, al mundo que nos rodea, pero a la hora de modelar y poetizar procuro que el poema tenga ritmo, música y emoción, al tiempo que diga algo nuevo. Los versos que más me gustan son los de siete, ocho y once sílabas; trabajo mucho con el endecasílabo estructurado en el verso blanco, que como todo el mundo sabe, tiene métrica, pero no rima.

P- ¿Cree que el poeta “evoluciona” en su escritura? ¿Cómo ha cambiado su lenguaje poético a lo largo de los años?

R- Sin duda que la “voz poética” va cambiando con los años. Este cambio se produce por varias razones porque nada es estático, el poeta aprende de su entorno, de las lecturas, de las influencias de otros autores, en fin, de todas las vivencias que forman su vida. En mi caso, si se leen mis primeros libros y se comparan con los últimos, se observa una mayor carga de novedad y de profundidad en la poesía que hago ahora. La “voz poética” es algo vivo que va cambiando en el día a día, y es algo inevitable para el propio poeta.

P- ¿Cómo siente que un poema está terminado y cómo lo corrige?

R- En este tema pasa igual que en la pintura y lo digo porque yo también soy pintor, cada vez que el autor lee su propio poema le parece que puede hacer algún cambio, y si lo lee pasado algunos días e incluso meses con mayor motivo. Ocurre lo mismo al pintar un cuadro, siempre que se ve de nuevo el pintor siente el deseo de dar alguna pincelada en algún punto. En mi caso, yo hago el poema, lo dejo un tiempo indeterminado sin leer y en la segunda revisión procuro cerrarlo.

Las correcciones vienen dadas por la visión y la intención que el poeta quiere transmitir, normalmente se trata de cambios en algunos versos o algunas palabras, porque la estructura del poema y su mensaje creo que están siempre definidos en su comienzo. En pintura hago lo mismo, el cuadro permanece un tiempo en soledad y en el segundo acercamiento procuro firmarlo.

P- ¿Cuál es el fin que le gustaría lograr con su poética?

R- Fundamentalmente aspiro a que mis libros se lean. Me gustaría que los lectores me conozcan a través de mis versos, porque yo me reflejo en ellos. La personalidad de cada escritor está presente en sus obras y yo no estoy fuera de esta afirmación. He dicho en ocasiones que soy un gran soñador y un romántico, y todo esto está en mi poesía de forma que se aprecia claramente.

P- ¿Qué lugar ocupa, para un poeta como usted, las lecturas en vivo?

R- Entiendo que la pregunta se refiere a los recitales. Yo he hecho muchos a lo largo de estos quince años que llevo publicando, me gustan y soy promotor de algunos. De cualquier forma, mi poesía la disfruto mejor cuando la leen otras personas, me parece que el poema de un autor debería ser siempre leído por otro. Se “atrapa” mejor su mensaje, su ritmo y su musicalidad.

P- ¿Qué opina de las nuevas formas de difusión de la palabra, ya sea en páginas de Internet, foros literarios cibernéticos, revistas virtuales, blogs… etc?

R- Estoy de acuerdo en ello, no es algo en lo que podamos influir, porque es un movimiento general de todos y resultaría difícil tratar de canalizarlo para mejorar su difusión y sobre todo su calidad. Hay mucho “ruido” en todo lo que sale a través de esas plataformas virtuales y no todo tiene la suficiente calidad para ser llamado “poesía”. La poesía tiene unos atributos que la definen de aquello que “NO es poesía” y eso separa a una cosa de la otra muy clara y definitivamente.

P- ¿Podría recomendarnos un poema de otro autor que le haya gustado mucho?

R- Soy un fan de Antonio Machado y su célebre “Retrato” me parece un magnífico poema que define su personalidad, porque en unos cuantos versos lo deja bien “retratado”, además de que tiene un ritmo y musicalidad envidiable.

P- ¿Qué libro está leyendo en la actualidad?

R- Estoy en estos días leyendo tres libros, “El infinito en un Junco” de Irene Vallejo, “Cuando se acerca la noche” de Roberto Gil de Mares, escritor colombiano, y “Fronteras desdibujadas” de Nery Santos Gómez, una escritora norteamericana.

P- ¿Qué consejos le daría a un joven escritor/escritora que se inicia en este camino de la poesía?

R- A quien sienta la llamada de la literatura y el deseo de escribir le diría que empiece cuanto antes. Que lea mucho para aprender, para ir formando su “voz poética”. Le diría que no tenga prisa por hacerlo todo en poco tiempo, que se deje llevar por su trabajo y el deseo de hacer las cosas bien. No por escribir mucho y publicar mucho se obtiene el interés de los lectores, esto viene por la calidad de su trabajo, y eso exige entusiasmo, constancia y esfuerzo.

P- ¿Cómo ve usted actualmente la industria editorial?

R- En mi opinión son tiempos difíciles porque la pandemia nos ha cortado las alas en el campo de las reuniones de presentación de libros, certámenes, recitales, ferias y otros eventos, sin embargo, con esfuerzo y constancia estamos aguantando el tirón. Recientemente hemos tenido la Feria del Libro de Madrid, que aunque con algunas restricciones se ha avanzado algo; yo he venido hace un par de días de la Feria del libro de Frankfurt, que ha evolucionado bien aunque con menos participación que en ocasiones anteriores, por parte de editores, agentes y público. En definitiva, la industria editorial aguantó la aparición de las plataformas digitales y aguantará lo que venga. El libro físico es un bien necesario para todos y tiene mucha aceptación general.

P- ¿Qué libros ha publicado?

R- Tengo publicados los siguientes libros:

Venticuatro poetas tímidos, (2013), editorial Amargord ediciones, Madrid.

Las raíces del tiempo, (2014), editorial DeTorres Editores, Córdoba.

El patio amarillo, (2017), editorial Sial Pigmalión, Madrid.

Aromas de otoño, (2018), editorial Sial Pigmalión, Madrid. Este libro obtuvo el Premio Internacional de Poesía Sial Pigmalión 2018, y el Premio Escriduende al mejor libro de poesía ilustrado, en la Feria del Libro de Madrid 2018.

Versos para Van Gogh, (2020), editorial Sial Pigmalión, Madrid. Este libro obtuvo el Premio Juan Felipe Herrera al mejor libro de poesía en español, certamen de la organización ILBA, International Latino Book Awards, de California, Estados Unidos, y también la Medalla de Oro en la International Awards Ceremony de los Latino Books, celebrada también en los Estados Unidos.

Huellas y paisajes, Antología poética, (2020), Editorial Universidad Externado, Bogotá (Colombia).

Miguel Hernández, Antología poética, (2020), Editorial Universidad Externado, Bogotá (Colombia.

Fragrances DAutomne, (2020), Editorial LHarmattan, Paris, (Francia).

En la actualidad estoy trabajando en un poemario y en una novela de relatos encadenados.

Autor de la entrevista Miguel Esteban Torreblanca