La norma indica cómo incorporar criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo —conocidos con el término ASG— junto a los criterios económicos en la definición y gestión de estos productos, y está dirigida a los gestores de fondos de inversión, fondos de pensiones (personales y de empleo), seguros de vida ahorro y entidades de capital riesgo (sociedades y fondos).

Con esta norma, se pretende contribuir al desarrollo de la ISR (Inversión Socialmente Responsable), constituyendo una herramienta que ayude a invertir en aquellas organizaciones que mantengan un mejor comportamiento desde el punto de visto de la responsabilidad social y contribuyan positivamente al desarrollo sostenible.

La UNE 165001:2012 contempla dos niveles de requisitos a exigir a un producto financiero socialmente responsable: generales y específicos para cada producto. Entre los requisitos generales se encuentran los de transparencia. Por ejemplo, la norma establece que se deben excluir las inversiones en paraísos fiscales y en otros territorios de nula tributación; garantizar la trazabilidad del 100% de las inversiones o satisfacer los criterios ASG establecidos en el ideario del producto en, al menos, un 90% del volumen de inversión. Además, se debe informar a los clientes de forma clara, precisa y entendible de todos los aspectos relevantes (definición de ISR aplicada, composición del comité ISR, comisiones aplicadas, etc).

Además, cada producto financiero debe tener un nombre específico y un ideario de ISR, donde se hagan constar los criterios ambientales, sociales y de gobierno corporativo, cumpliendo con dichos criterios. En la selección de criterios se debe, como mínimo, garantizar el cumplimiento de la normativa en ASG, añadiendo criterios adicionalmente. Por ejemplo, desde no invertir en empresas que vendan armas hasta favorecer a aquellas que están comprometidas con el medio ambiente o la responsabilidad social con todos sus grupos de interés, entre otros.

Asimismo, se constituirá un comité ISR que velará por el funcionamiento correcto del producto, y que requiere una mayoría de miembros independientes de reconocido prestigio.

Además, la entidad responsable del producto tendrá que aplicar un filtro ISR, es decir, un sistema de aplicación práctica del ideario y la política de inversión. Para ello, podrá usar como fuentes de información índices de Sostenibilidad; Sistemas de Gestión de Responsabilidad Social certificados; información de RS verificada por terceras partes de reconocido prestigio (Memorias e Informes) o agencias de información, análisis y calificación de RS.

Del mismo modo, la entidad debe ejercer los derechos políticos, mostrando su compromiso activo y apoyando la gestión socialmente de las empresas en las que invierte. Así, debe votar en las junta generales de accionistas según su ideario, pudiendo proponer cambios en las políticas de empresas.

Esta norma ha sido revisada y actualizada respecto a la antigua versión del año 2002, para incorporar los cambios de los entornos financieros, las nuevas exigencias en el desarrollo de la práctica financiera, la mayor madurez de los conceptos de RS y la mejora de la transparencia.

Esta norma es certificable por tercera parte independiente, lo que permite garantizar rigor y credibilidad en los productos financieros socialmente responsables. AENOR presentó esta norma y certificación en una jornada, organizada conjuntamente con Spainsif.

 

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