El Ingenio español se pierde en el cielo
El satélite español que tenía como objeto la observación de nuestro planeta, preferentemente nuestro País y sus cosechas y desertizaciones, se ha perdido en el cielo a los pocos minutos de su lanzamiento.
El satélite español que tenía como objeto la observación de nuestro planeta, preferentemente nuestro País y sus cosechas y desertizaciones, se ha perdido en el cielo a los pocos minutos de su lanzamiento.
Los milagros son tan difíciles de ver como aquellos unicornios mitológicos, no es de extrañar que no los veamos todos los días. Y por lo que vemos y escuchamos, amigas y amigos lectores, tampoco existen las cortes de los milagros.
La Fiscalía del Tribunal Supremo ha iniciado una investigación por posibles comisiones ilegales del entonces inviolable rey de España, Juan Carlos I. Nadie sabe hasta dónde podrán llegar los fiscales encargados, pero todo el mundo percibe que el anterior jefe del estado no tenía nada de mérito.
Aunque parezca que les hago un favor dándoles plaza y comentario, no puedo dejar de escribir sobre las manifestaciones del sábado. No es fijación, es pena por los claxon de los automóviles que participaron, víctimas inocentes de un patrono equivocado.
Las cacerolas en el barrio de Salamanca de Madrid son del mejor acero inoxidable, grandes y capaces, brillantes merced al empeño y a los salva uñas de las chicas de servicio de las moradas más lujosas de la capital de España. Cacerolas que nunca han visto a sus dueñas, salvo estos últimos días.
Y llegó el sábado, salió el sol en gran parte de España, los ángeles profanos entonaron el aleluya y todos pudimos salir al recreo, eso sí por orden y por cursos.
En medio del fragor de la batalla del Covid19, una guerra global, unos cuantos siguen a lo suyo en un intento milenario e involucionista.
En estos días de recogimiento forzado y de meditación y a la espera de mejores noticias sobre la pandemia, se observan dos tipos de actitudes en nuestra sociedad: la de los aplausos y la de las cifras.
Ese maldito covid19 se ha cobrado esta madrugada una nueva víctima. Otra más de las numerosas bajas globales de la batalla que nos ha tocado librar.
“El norte no ha notado tanto los efectos y no está por la labor de tomar medidas.” (Fuentes diplomáticas)