Estos “biotaxis”, importados de China por la empresa BYD, están en capacidad de hacer trayectos de hasta 300 kilómetros con una carga de cerca de dos horas en las “electrolineras”, como se llama a las estaciones en las que son abastecidos de energía.
Con esta novedad en el sector automotriz, “Bogotá se pone a la vanguardia en la lucha contra el cambio climático”, aseguró el alcalde de la ciudad, Gustavo Petro, durante la presentación de los vehículos en el Parque Tercer Milenio, en el centro de la ciudad.
Petro dijo que como parte de esta política, Bogotá trabaja en la implementación de vehículos eléctricos en la red de autobuses públicos Transmilenio, así como en el Sistema Integrado de Transporte Público (SITP).
Petro anunció además que los vehículos eléctricos, públicos o particulares, no estarán sometidos al programa de restricción de circulación llamado “Pico y placa”, según el último número de su matrícula, una medida que espera que incentive a los conductores a adquirir un vehículo eléctrico en lugar de tener hasta dos automóviles a gasolina.
El alcalde señaló que el uso de energía eléctrica en el transporte público tiene consecuencias directas en la salud de los bogotanos.
Petro resaltó además que en Bogotá es posible “mover el transporte público en una proporción importante con el agua que se transforma en energía” al explicar que a diferencia de otros países la mayor parte de la electricidad nacional proviene de fuentes limpias como las hidroeléctricas.
Los “biotaxis”, que no emiten ningún tipo de gas contaminante y tampoco ruido, podrán ser recargados con 60 kilovatios en las electrolineras, donde cada recarga completa le costará al propietario unos 31.500 pesos (cerca de 17 dólares), un gasto mucho menor que el que tienen los autos convencionales a gasolina.
No Comment