Los primeros años de vida de Eduardo transcurrieron en Valderrubio un pueblo situado a unos 20 km. de Granada. En 1750 el pueblo se denominaba Asquerosa donde Alfonso Joseph Mazuecos y su esposa, María Rojo, vendrían a vivir. Siglo y medio mas tarde un descendiente suyo sería bautizado como Federico de Jesús García Lorca. Trascurriría otro siglo más para que otro descendiente, en este caso Eduardo Ruiz Baena, contara la historia de la familia.

Emigró a Holanda de 1998 a 2005 donde renunció a su trabajo en la multinacional Sandvik. Ltd. para ejercer como auxiliar en la Embajada de España de la Haya.

Regresó a España para desempeñar la tarea de director comercial de un complejo turístico en Almería. Posteriormente se incorporaría como responsable de marketing y comunicación en Destilerías Líber empresa de la que es socio fundador.

Como experto en planificación y organización de eventos, y como docente y conferenciante a participado en un sinfín de cursos sobre organización de congresos, marketing y gestión de calidad en hostelería. En el año 2022 se gradúa en Comunicación Audiovisual por la Facultad de Información y Documentación de la Universidad de Granada.

La presentación de su cuarto libro, que le dedicó a la figura de García Lorca, le valió en agosto de 2018 ser distinguido en New Jersey (USA) como miembro de la Asociación Americana de Literatura Moderna Internacional.

 

Miguel Esteban Torreblanca¿Algo de lo que nunca hablarías en tus textos ?

Eduardo Ruiz Baena- Realmente esta es una buena pregunta que me hace reflexionar sobre la auto censura. Después de reflexionar sobre ello, pienso que soy capaz de escribir sobre cualquier tema, pero otra cuestión es si ese texto resultaría incómodo para los amigos y conocidos que no piensan igual que yo, pero que aprecio enormemente. Soy muy editorialista, mis trabajos suelen ir dirigidos a un nicho de población muy determinado e intento agradar aunque la transgresión sea uno de mis recursos.

P- ¿Qué es lo más ridículo que has hecho por amor?

R- Declararme a una chica en el pasillo del instituto.

P- ¿Qué haces cuando te atascas escribiendo?

R- No me suele suceder. El atasco suele sobrevenirme por cansancio; en ese caso me acuesto para dormir una siestecilla.

P- ¿Tienes alguna cicatriz interesante?

R- Las cicatrices que tengo en mi piel son de lo más tonto y vulgar, las del alma quizás sean más interesantes.

P- ¿A qué escritor, vivo o muerto, retarías a duelo de espada en un molino al amanecer?

R- A Lorca; y me dejaría vencer; no sin antes recomendarle que se marchara de Granada.

P- ¿Una pesadilla recurrente ?

R- Hace tiempo que no la tengo. Era mi pesadilla de soltero. Una cita en la habitación de un hotel con la actriz sex-simbol de aquella época. Yo subo en el ascensor para acudir al tórrido encuentro pero el elevador nunca se detiene en la planta adecuada. La cita nunca llegaba a consumarse.

P- ¿-Serie a la que estás enganchado?

R- Bosch

P- ¿Una web a la que seas adicto ?

R- A la web del diario Granada Hoy.

P- ¿La película con la que más te has reído?

R- La Vaquilla

P- ¿A quién plagiarías?

R- No suelo hacer a los demás lo que no me gusta que me hagan a mí. El plagio es como asesinar la creatividad ajena. Cuando estoy escribiendo algún texto, en cualquier ámbito procuro usar programas anti-plagio para evitar no citar correctamente. Pero puestos a fastidiar plagiaría a un tal «Adolfo» y le daría la vuelta a su criminal Mein kampf

P-  Puedes matar a un personaje de la literatura mundial. ¿Cuál y por qué?

R- ¿Trump ha escrito algo? El motivo es obvio.

P- ¿Con qué tres adjetivos te describiría tu lector ideal?

R- Incisivo, locuaz y sensible.

P- Si te obligaran a escribir un libro con otro/a escritor/a, ¿quién sería?

R- Obligar significa hacerlo en contra de mi voluntad. En ese caso con Federico García Lorca. Se pondría en evidencia mi mediocridad al lado de un genio.

P- ¿Cuál es tu récord de tiempo escribiendo sin parar?

R- Cinco horas

P- ¿Podrías tener una relación sentimental con otro escritor o escritora?

R- Sí, con mi correctora de estilo: es mi mujer.

 

Autor de la entrevista Miguel Esteban Torreblanca