He esperado un par de días para ver cómo evolucionaba la noticia. Al igual que imaginaba, en apenas cuarenta y ocho horas poco se ha vuelto a hablar del tema. Pero yo quiero proseguir con el debate. Exijo que se aclare y se pidan las oportunas responsabilidades a la farmacéutica y a sus responsables. Incluso, que después de las oportunas indagaciones, no se descarte la posibilidad de que los tribunales europeos intervengan.

La cantidad escondida supone el doble de las dosis que ha recibido Europa de la firma anglo-sueca. La Unión Europea sospecha de la existencia de un acuerdo entre AstraZeneca y el Gobierno británico en detrimento de los socios comunitarios que aportaron ayudas y compromisos de compra para la investigación. Todo un alarde de lo peor del capitalismo.

No estoy en contra de la iniciativa privada, es más, considero que muchos de los avances técnicos y de investigación son gracias a ello. Tampoco en que la inversión y el riesgo se vean compensados con beneficios, ni tan siquiera que se lucren de las necesidades, miserias y pandemias de la sociedad, si los dividendos son los justos, los salarios los apropiados y sus obligaciones con la Hacienda pública las que la ley y el erario demanden, sin escaqueos ni engaños.

Sin embargo, este capitalismo de aprovechamiento feroz, de trampas y de beneficios desmesurados de las multinacionales, vendiendo sus vacunas a quienes mejor les pagan, sea Israel, los Países Árabes o la misma Gran Bretaña, muestran la verdadera cara del sistema y precisan de una respuesta contundente, porque sus intencionados y criminales atrasos de entrega, producen enfermedad, dolor y muerte.

Repito que, a pesar de las comisiones de control  y de las exigencias en el cumplimiento de los compromisos que anuncia la Unión, todo quedará en agua de borrajas, pesan demasiado las farmacéuticas.

No obstante, opino que esto tendría que llegar muy lejos, incluso al tribunal de Derechos Humanos. Los ejecutivos que han autorizado esta operación de dilación y de escondrijo, no deben ser comparados a trileros y estraperlistas, sino a los que dejan a las gentes indefensas frente a sus enemigos en tiempo de guerra. Son responsables y traidores a la Humanidad.