Crisis, desigualdad y pobreza
Los ricos más ricos y los pobres más pobres. Suena a tópico pero la crisis económica está haciendo cada vez más patente esta realidad.
Los ricos más ricos y los pobres más pobres. Suena a tópico pero la crisis económica está haciendo cada vez más patente esta realidad.
La Cruz Roja y la Media Luna Roja de Europa registran una tendencia preocupante de pobreza en la región que en algunas zonas alcanza el nivel de la Segunda Guerra Mundial, según dijo a RT Anitta Underlin, directora europea de la Cruz Roja.
En las regiones arroceras más desfavorecidas de Burkina Faso, los campesinos han dado un vuelco a sus vidas, participando activamente en la producción, procesamiento y comercialización del arroz.
Nuestras sociedades avanzan, seguimos rindiendo culto al crecimiento económico y a las nuevas tecnologías, las distancias se acortan y el mundo se globaliza, pero (y este “pero” cada vez es más hiriente) “nunca los ricos han sido tan ricos, ni los pobres tan pobres.
Cuando empezamos a trabajar las acciones de la Semana de Lucha contra la Pobreza me vino a la mente una conversación que tuve con mi amigo Matías mientras caminábamos por un lugar que no recuerdo entre Logroño y Burgos. Quizá, aunque nuestro objetivo nada tenía que ver con lo espiritual, el misticismo del Camino de Santiago nos hizo dejar por un momento los comentarios sobre las ampollas, el calor o los dolores de rodilla. Así, mientras Juanmi, el tercero de la “expedición”, nos dejaba atrás, nos pusimos a charlar sobre la riqueza y la pobreza.
La migración de poblaciones rurales a ciudades en la Amazonía brasileña no resulta en el tan esperado alivio de la pobreza ni en la conservación de la biodiversidad, según un profesor del Centro del Medio Ambiente de la Universidad de Lancaster.
Aristóteles dijo que “Los más grandes crímenes no son cometidos por causa de las necesidades, sino por causa de las superficialidades”. Valga esta cita como punto de partida para exponer una idea que cala, en algunos sectores, cada vez con más intensidad: el problema de la desigualdad no radica en la pobreza, sino en el exceso.
“No podemos ir a peor”. ¿Cuántas veces hemos oído esta frase? Pensamos que más pobreza, más precariedad, más paro, más desahucios, más hambre son imposibles. La realidad contradice dicha percepción.
Aunque la pobreza ha disminuido rápidamente en los últimos tres decenios, la humanidad continúa enfrentando desafíos urgentes y complejos.
De no corregirse, las políticas de austeridad podrían incrementar entre 15 y 25 millones el número de europeos viviendo en la pobreza en 2025. Esto elevaría el número de personas en riesgo de pobreza en Europa hasta los 146 millones, más de un cuarto de la población, advierte Oxfam (Intermón Oxfam en España) en su informe “La trampa de la austeridad”.