El Gobierno de Botsuana, culpable de “trato degradante”.
El caso es descrito como una “desgarradora historia de sufrimiento humano y desesperación”.

Con el apoyo de Survival International, los bosquimanos recurrieron una sentencia del Tribunal Supremo de 2010 que les impedía acceder a un pozo del que dependen para obtener agua.El tribunal, compuesto por cinco jueces, ha determinado que:

  • Los bosquimanos tienen derecho a usar el viejo pozo, cuyo uso les había prohibido el Gobierno.
  • Los bosquimanos tienen derecho a excavar nuevos pozos.
  • La conducta del Gobierno sobre los bosquimanos supone “trato degradante”.
  • El Gobierno debe pagar los costes judiciales del recurso de apelación de los bosquimanos.

Celebrando la decisión, un portavoz bosquimano ha declarado: Estamos muy felices de que finalmente se hayan reconocido nuestros derechos. Llevamos mucho tiempo esperando esto. Como cualquier ser humano, necesitamos agua para vivir. También necesitamos nuestra tierra. Rezamos para que el Gobierno nos trate con el respeto que merecemos a partir de ahora”.

La sentencia significa que los bosquimanos podrán por fin usar un pozo vital. © Survival

En 2002, los bosquimanos fueron expulsados a la fuerza de sus tierras ancestrales en la Reserva de Caza del Kalahari Central por el Gobierno de Botsuana. Llevaron al Gobierno a los tribunales y, después de cuatro años, lograron un veredicto histórico que decía que habían sido expulsados ilegal e inconstitucionalmente, y que tienen el derecho a vivir en sus tierras ancestrales.

Sin embargo, desde entonces, el Gobierno ha seguido impidiendo a los bosquimanos regresar a casa

, prohibiéndoles acceder a un pozo que selló durante las expulsiones. A pesar de la falta de agua, muchos bosquimanos han vuelto a sus hogares, sobreviviendo con el agua de lluvia y melones, y haciendo duros viajes a pie o en burro para traer agua desde fuera de la reserva.

Los bosquimanos llevaron al Gobierno a los tribunales otra vez en un intento de conseguir acceso a su pozo. Sin embargo, el juez Walia, que presidió la vista oral de 2010, dictó una sentencia favorable al Gobierno, en la que argumentaba que los bosquimanos “tienen la culpa de cualquier incomodidad que puedan soportar”. Su decisión ha sido revocada por la decisión unánime de los cinco jueces del Tribunal de Apelaciones, que han dictaminado que denegar a los bosquimanos el acceso a su pozo es un trato “degradante”, contrario a la Constitución.

El trato del Gobierno a los bosquimanos ha recibido muchas condenas. La Comisión Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos criticó duramente al Gobierno por negar a los bosquimanos su “derecho a la vida”, mientras que el más alto funcionario de Naciones Unidas para los pueblos indígenas determinó que el Gobierno había provocado que los bosquimanos se enfrentasen a “ duras y peligrosas condiciones debido a la falta de acceso al agua”.

Agravando aún más la situación de los bosquimanos, el Gobierno excavó nuevos pozos exclusivamente para animales salvajes en la reserva y permitió a Wilderness Safaris abrir un alojamiento turístico de lujo con piscina en territorio bosquimano. Más de 30.000 personas han firmado hasta el momento una petición para que Wilderness Safaris desmantele el alojamiento en tierra bosquimana.

El Gobierno también ha dado luz verde a Gem Diamonds para que abra una mina valorada en 3.000 millones de dólares en una de las comunidades bosquimanas, y sigue impidiendo a los bosquimanos cazar para obtener comida.

“Es una gran victoria para los bosquimanos, y para el conjunto de Botsuana. Esperamos que sea bienvenida como tal por las autoridades, y que no se vea sólo como un obstáculo para sus intentos de expulsar a los bosquimanos de sus tierras para dejar paso a la minería de diamantes. Una declaración del presidente Khama sería el signo más claro de si la posición del Gobierno ha cambiado con motivo del veredicto. Esto es, al fin y al cabo, una victoria para los derechos humanos y el estado de derecho en toda Botsuana”.

Por Stephen Corry, Director  Survival International