Desperté una mañana con los ojos de la esperanza. Desperté con ganas de vivir, de querer, de amar, simplemente de ser, de exponer y no ocultar.
Cambié el rumbo de mi vida una mañana al abrir la ventana entrando el aire de la seguridad, la inspiración y la decisión.
Hoy por fin me siento una mujer libre y feliz.
Hoy me siento yo y me reconozco porque cambié, en una mañana con ojos de esperanza, el rumbo de mi vida.
Cambié el rumbo de mi vida una mañana al abrir la ventana entrando el aire de la seguridad, la inspiración y la decisión
No importa el dia ni la hora,
la espera termina
en el momento que el pensamiento
germina la idea…
Fue hoy que la esperanza
cambio el rumbo de la brújula
de ese barco que estuvo a la deriva.