Tu identidad se compone de una serie de categorías determinadas por ti y tu entorno, esta identidad es única e irrepetible, es decir, tú eres único, única, irrepetible y te pido que aprendas a no compararte con nadie, aunque creas que es inevitable, no pierdas tu identidad propia.

Puedes encontrar que tienes aspectos en común con personas cercanas, siempre existirán características que serán solo tuyas, estos aspectos permiten tu construcción como individuo sobre ti mismo en función de cómo son los demás.

Podemos pertenecer a diferentes grupos sociales a la vez, esta pertenencia que tú eliges, unas veces es por voluntad propia y otras incitado por amigos de otros grupos, esta diversidad de gente te supondrá aportes y aspectos positivos o negativos en función de la valoración que tú hagas del grupo al que perteneces, de aquí genera la importancia de la comparación que hagas de ti mismo, de tus valores, de la autoestima y de la gestión adecuada de tus emociones para que en ningún momento pierdas tu identidad, tus valores, tus proyectos, ilusiones, tus creencias…puedes por decisión propia dejarte llevar por las circustancias: ejemplo, hoy te toca cumpleaños de un amigo/amiga pero no me cae muy bien, yo no iría, entonces, por esa pertenencia al grupo de amigos comunes, voy a ir a la fiesta porque si no seré el raro y estaré marcado.

La construcción de tu identidad, como ves, es un proceso social, desde que nacemos formamos parte de grupos que comparten características, como la religión, el género, el sexo, etnia, profesión, nacionalidad, familia, amigos, grupo escolar, vecinos…

¿Quién soy yo?, la suma de todo lo que puedes llamar tuyo, desde tu cuerpo hasta todas tus posesiones materiales e inmateriales, ideas, pensamientos, sentimientos.

Tu identidad, tu yo, es un fenómeno que consiste en verte a través de los ojos de los demás como si te estuvieras mirando en un espejo, según percibas ese espejo te estás construyendo tu propio concepto sobre ti mismo, de una forma congruente que se asemeja a la forma en la que te ven los demás, como tu apariencia, comportamiento, metas, deseos, características, gustos, moda, sueños… pero si no te sientes bien con ese reflejo, mírate en otro espejo, busca tu propia identidad, tu coherencia con lo que piensas y lo que sientes, no estés por estar, por agradar a otros, toma tus propias decisiones, serán las tuyas, te equivocarás tú, si te sientes marioneta en manos de tus amigos o de tu propia mente, reacciona, reflexiona, no importa la edad que tengas, es el momento de volver a tu encuentro, a lo que de verdad eres y que todavía no has descubierto.

Yo soy un individuo que cada día me conozco un poco más, me cuido, me valoro, me aprecio y me quiero, soy mi mejor compañero de camino en el lugar que yo decida o me corresponda estar.