¿Por qué las playas chilenas se cubren con animales muertos?
Las aguas cálidas han convertido las costas una vez prístinas de Chile en una vista desolada y muerta.
Las aguas cálidas han convertido las costas una vez prístinas de Chile en una vista desolada y muerta.
Las pruebas realizadas en muestras de tejidos muestran que los animales marinos murieron después de consumir sustancias que dañaron sus órganos internos.
La polinización de los cultivos, esencial para la alimentación de la humanidad, está en peligro por la creciente desaparición de abejas y abejorros en todo el mundo. Un problema que ya puede considerarse global según el informe publicado por el PNUMA (Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente).
El Gobierno asegura que no tiene recursos para establecer las causas de tan elevada mortandad. En 2012 registró otra: entre febrero y abril 877 ejemplares perdieron la vida.
En una inspección multisectorial que se hizo en 20 kilómetros de las playas de Sechura se encontraron 26 ejemplares de delfines muertos, que fueron varados por las aguas del mar al sur del sector de Reventazón. También se hallaron los cadáveres de 11 lobos marinos y 15 tortugas.
En respuesta a la rápida disminución de las poblaciones de abejas melíferas grupos ambientales y de seguridad alimentaria demandaron a la Agencia de Protección Ambiental de EE.UU. por autorizar el uso de pesticidas mortales para los antófilos.
Ayer, después de casi 20 años de inacción, entró en vigor en la Unión Europea la prohibición de tres insecticidas demostradamente peligrosos para las abejas.Aunque es un paso muy importante y decisivo, sin duda no es suficiente para que las abejas y el resto de polinizadores vuelvan a volar tranquilas y puedan seguir haciendo lo que mejor saben hacer, polinizar.
La muerte de cientos de tortugas marinas en Guatemala, El Salvador, Costa Rica y Panamá, y el retraso o reducción del desove en Nicaragua y Honduras, disparó este año las alarmas de ambientalistas y científicos.
Monsanto, la inmensa compañía biotecnologica que ha sido culpada por la reducción de la población de abejas, compró una de las organizaciones líder en investigación sobre el colapso de abejas.
El 6 de julio de este año Greenpeace recibía una llamada de un apicultor que alertaba sobre la muerte masiva de sus abejas en un campo de girasoles al sur del lago Lakaton en Hungría.