La denominación incluye algunas o todas las especies de varios géneros dentro de la subfamilia de los Serrasalminae, subfamilia que también incluye a peces herbívoros. Su presencia es especialmente destacada en la Amazonia, el Orinoco, las Guayanas y Paraguay. También habitan en México, Bolivia, Perú y Argentina.

Entre las características fisiológicas generales de estos peces, está la forma de su cuerpo:vistas de perfil son de forma ovalada y casi redonda en algunas especies, vistas de frente son de silueta comprimida, miden entre 25 y 60 cm. Presentan aletas pectorales y pélvicas poco desarrolladas, mientras que las aletas caudal y anal son bastante amplias.

Según la especie se encuentran en colores plateadas, verdosas, rojas, negras y doradas. Los dientes de la piraña son afilados, de forma triangular y ligeramente curvos, pudiendo llegar a medir hasta 1 cm. de longitud. Las actuales pirañas tienen una sola fila de dientes triangulares como la hoja de una sierra y cada diente de sierra, sería como una pequeña hoja de afeitar. Las pirañas tienen un gran campo visual, gracias a la especial colocación de sus ojos y su oído también es muy bueno. Su sentido del olfato es bastante agudo, una cualidad muy útil para las carnívoras ya que detectan inmediatamente el olor de la sangre en las cercanías, incluso con bajas concentraciones en el agua.

Las pirañas son gregarias y viven formando bancos de miles de peces. Los ríos sudamericanos, en muchas ocasiones están plagados de pirañas, también denominados por los nativos pez diablo. Son peces carnívoros de agua dulce que están presentes en grandes extensiones como es la Amazonía o, en gran des ríos, como el Orinoco. Un pez que se está muriendo o la natación errática será rápidamente atacado por un gran banco de pirañas. También atacan sin previo aviso para defender el territorio y sus huevos.

La mayor parte del tiempo se alimentan de peces de todo tipo siendo bastante frecuente el canibalismo entre las pirañas, también comen pájaros, ranas e incluso carroña. Cuando atacan a los animales, lo hacen sin piedad y en unos pocos minutos, se concentran cientos de ellas siendo atraídas por la sangre de la víctima, quedando ésta reducida a los huesos. Se constatan también ataques a los seres humanos, ocasionándoles graves heridas e incluso la muerte. Según Ray Owczarzak, asistente del conservador de peces del Acuario Nacional de Baltimore, las pirañas raramente atacan al hombre pero en caso de hacerlo se necesitarían entre 300 y 500 pirañas para devorar toda la carne de un humano que pesara 80 kg en 5 minutos. En abril de 2012, 49 personas tuvieron que ser auxiliadas, entre ellas una joven de 21 años que ha perdido parte de un dedo, debido a la mordedura del pez, en la localidad turística de Sapocó (Bolivia). Anteriormente, el 26 de noviembre de 2009, sucedió un accidente cuando una excavadora cayó en el río del Amazonas, mientras personas realizaban trabajos sobre una línea de gas. El operario que manejaba la excavadora rompió el cristal para liberarse, pero las lesiones producidas por los cortes del vidrio emanaron sangre que atrajo a las pirañas. El hombre murió destrozado casi por completo por los afilados dientes de las pirañas. Hace poco más de un año, en diciembre de 2011, un joven pescador de 18 años falleció trágicamente en el río Yata, a unos 50 kilómetros de la población de Guayaramerín, Beni, tras sufrir un ataque de pirañas mientras se bañaba. Murió por desangramiento provocado por decenas de mordeduras de pirañas en la garganta y el rostro.

Los bancos de pirañas son capaces de devorar, en pocos minutos, a animales de gran tamaño, aunque también existen otras especies de pirañas que comen frutas y semillas que caen de los árboles y, en momentos puntuales, también comen vegetales. Las especies más peligrosas de pirañas son: la negra o pez tigre, la piraya, la roja y la de boca de fuego. Tienen una longevidad de entre 12 y 15 años.

En gran cantidad de ocasiones, los nativos se bañan tranquilamente en las aguas frecuentadas por las pirañas; además las pescan siendo uno de sus alimentos cotidianos. En México y otros países latinoamericanos la piraña se come frita, empanándola primero y acompañada de patatas fritas; su gusto es delicioso. Los indios Yagua de Perú utilizan a menudo los bordes afilados entre los dientes de un maxilar de piraña para afinar el punto de sus cerbatanas y en otros pueblos sudamericanos también sus dientes sirven como puntas de flecha y las mandíbulas como navajas de afeitar o tijeras.

Las pirañas consiguen su madurez sexual al año de su nacimiento. En el momento del apareamiento marcan su territorio y lo defienden con gran agresividad. A veces la hembra se aleja un poco de la puesta, pero el macho permanecerá para cuidar la prole. Otra señal importante sobre la posibilidad de cría se demuestra cuando el macho realiza círculos, durante varios días, en su área territorial. La hembra se aparea con este macho y se constata que antes de la puesta la pareja suele comer más de lo habitual. Pocos días después, la hembra pone sus huevecillos, entre 1.000 y 5.000, en el fondo de las plantas y vegetación del río.

Durante la fecundación de los huevos ambos se colocan mirando hacia el mismo lado y luego el macho nada en círculos sobre los huevos mientras la hembra aleja al resto del cardumen. Cuando  las crías han eclosionado, el padre de los alevines se pone especialmente agresivo e incluso puede llegar a atacarlos con violencia. Su crecimiento es muy rápido durante los primeros meses de vida llegando algunos alevines de piraña a alcanzar los 21 cm. en 6 ó 7 meses.

Distintos documentos indican que por el lugar que ocupan dentro de su ecosistema, las pirañas, a su vez, sirven de alimento a animales más grandes como caimanes o cocodrilos, especialmente en la zona del Brasil. Los lagartos, algunos de más de un metro de longitud, se alimentan también de pirañas. Según informa Manlio Roca:“Los lagartos que se alimentan de pirañas casi han desaparecido por la caza indiscriminada de que son objeto”, explicó el funcionario.

Otro de los grandes enemigos que tiene este pequeño gran depredador es, como queda en evidencia, el hombre y en Posadas pareciera existir una saña poco habitual ya que hace unos años atrás, la decisión de empezar por eliminarlas se concretó organizándose un insólito menú que constaba de”hamburguesas de piraña”, como tratando de incentivar su consumo y a la vez sacarlas del río.

Según Walter, para pescarlas es necesario equipos especiales ya que con los métodos convencionales es probable que la pieza tan apuntada logre escapar gracias a sus poderosos y filosos dientes. La carnada, simplemente un trozo de corazón de vaca, algo que no falla a la hora de conseguir la máxima atención de las pirañas que olfatean con gusto el olor a sangre. En un concurso de pesca,en solo seis horas, fueron capturadas 1.670 ejemplares mediante 20 botes con tres personas cada una.

En Encarnación, las venden. Desde hace unos tres años, según los miembros de la Asociación de Pescadores Comerciales de Encarnación, Paraguay, vienen asegurando que aumentó considerablemente la cantidad de pirañas en el río Paraná, situación que repercute negativamente en sus labores diarias. Bernardo Martínez, presidente de la agrupación, manifestó al diario La Nación de ese país, que la presencia masiva de las pirañas causa un gran perjuicio a los pescadores, ya que esos peces rompen las redes, espineles y carnadas. “Nosotros pescamos desde la zona de Encarnación hasta Tres Bocas, del arroyo Tacuary, y la gran cantidad de pirañas nos afecta porque rompen las redes y espineles, ya sean de piola o nylon. Hay pirañas chicas y grandes de hasta dos kilos que a veces logramos sacar y comercializamos a 6.000 guaraníes el kilo (1,20 euros)”.

El encargado de la Fundación Search And Rescue Santa Cruz (Fundación SAR), Runny Callaú, indicó que para controlar la excesiva proliferación de las pirañas se pedirá la ayuda de expertos, comentando que en Brasil se exterminó a las pirañas con un producto químico. En el río Amarillo (China) se han introducido, hace varios años, pirañas procedentes de la Amazonia sudamericana. La administración china pretende acabar con ellas, al igual que hizo con 300 pirañas que tenía en un acuario de Pekín, administrándoles hipoclorito de sodio. Estos productos químicos, para acabar con la proliferación de pirañas, no son aconsejables ya que pueden contaminar las aguas de los ríos y matar a otras especies de peces y animales acuáticos.