Tras el aumento de ésta en el resto de los países occidentales, nos ha llegado a nosotros, último reducto de libertad sin extremos, haciéndose con el poder en la Junta de Andalucía tras un pacto con el PP y Ciudadanos, pacto que le resulta claramente vergonzante a Ciudadanos, que no ha querido hacerse la foto en conjunto, pero sabiendo que sin los votos de ellos no era posible un gobierno de derechas; y un PP que por fin se ha quitado la piel de cordero y ha sacado el lobo que lleva dentro, para reconocer que esas son sus ideas y que las van a llevar a la práctica sin tapujos.

Yo creí que cuando alcanzase cierta edad, ganaría en experiencia y casi nada me sorprendería. Que tonto. A medida que fui cumpliendo años, más y más cosas me fueron dando de golpe en la cara, y lo cierto es que no deja de sorprenderme ver como gente de hoy en día, con educación y estudios, piense que los salva patrias les van a ayudar, cuando lo que quieren es que volvamos a la edad media y seamos los siervos de sus amos, quitándonos los derechos y libertades que tanto esfuerzo nos costó conseguir.

Eso sí, envolviéndose en las tradiciones, la bandera y, lo que es peor, mintiendo, ya que en este mundo de hoy con información por todas partes al segundo y sin contrastar, a fuerza de repetir una mentira al final queda como verdad.

Echo en falta por parte de los demás, más contundencia a la hora rebatir punto por punto y sin complejos los postulados de la derecha, la cual no sólo no nos ha sacado de la crisis, sino que nos ha hecho profundizar más en ella, quitándonos lo más necesario para nuestro pueblo con una reforma laboral que ha dejado a la mayoría de los trabajadores en una situación de extrema precariedad haciendo algo nunca visto, trabajadores pobres. Una reforma sanitaria que nos deja sin profesionales médicos y cuyo objetivo es privatizarla para así llenarse los bolsillos, aunque su gestión sea tan nefasta que todo el dinero de la Seguridad Social vaya hoy a tapar los agujeros de los hospitales por ellos gestionados, dejando el resto de servicios cojos, como ocurre con la Atención Primaria. Y una reforma educativa que lo único que pretende es que solo puedan estudiar los que tienen dinero.

Su último caballo de batalla es la inseguridad ciudadana, mentira que no se cansan de repetir una y otra vez, cuando la realidad es que vivimos en el País más seguro de Europa occidental. Atacando directamente las leyes de igualdad y protección de la mujer para que un violador o un maltratador y asesino pueda salir impune después de cometer su fechoría por el mero hecho de ser hombre.
Se olvidan de que ellos son hijos de una mujer.

Soy Español, madrileño, hijo de una extremeña y un toledano y vivo en un pueblo de la provincia de Guadalajara, Concejal por el Partido Socialista Obrero Español y mi bandera es la que está representada en la Constitución de 1978 como la del resto de españoles y de la cual se han apropiado las derechas.

He luchado toda la vida contra la desigualdad de las clases y de género, y animo a todos los ciudadanos a luchar para no perder ni un derecho más, y a mi partido a salir a la palestra, dar la cara y decir las cosas sin miedos, sin lo políticamente correcto y cogiendo el toro por los cuernos.

Me viene a la cabeza el recuerdo de una gran película del director Sam Peckinpah “La Cruz de Hierro” cuya cita final de Bertolt Brecht, decía: “No os regocijéis en su derrota. Por más que el mundo se mantuvo en pie y paró al bastardo, la perra de la que nació está en celo otra vez”.

Joder, cuánta razón tenía!